• El obispo católico secuestrado en la India pedía igualdad de derechos para los dalits cristianos y musulmanes.
  • Los dalits, la casta de menor rango en el país, son discriminados. En la India hay unos 24 millones de dalits, de los que unos 17 millones son cristianos.
  • Al menos, el primer ministro de la India pide perdón en persona por la carga policial contra curas y monjas.
  • En la India, los fundamentalistas hindúes se dedican a perseguir a las minorías religiosas.
Como explicamos, la policía arrestó al arzobispo católico de Nueva Delhi (India), Mons. Anil Couto, quien participaba junto a otros líderes religiosos en una marcha pacífica en protesta por la discriminación de la casta de los dalits (la de menor rango en el país), la mayoría de los cuales son cristianos, informaba Fides.

La manifestación pacífica a favor de los derechos de los dalit y otras minorías étnicas y religiosas fue convocada por una amplia alianza ecuménica, con el Arzobispo Anil Couto, otros obispos católicos indios, obispos protestantes, líderes evangélicos, numerosos sacerdotes, religiosas y pastores, y también representantes islámicos.

Según señala la agencia Fides, la marcha pedía la derogación del Decreto Presidencial de 1950 que legaliza la discriminación contra cristianos y musulmanes de origen dalit. En la India hay unos 24 millones de dalit, de los que unos 17 millones son cristianos.

El All India Christian Council (que reúne a católicos y protestantes en temas comunes) declara en una nota estar "conmocionado y consternado por el arresto provocativo de los obispos y de otros líderes". El Consejo recuerda otro precedente de hace años: el 2 de noviembre de 1997 algunos obispos fueron arrestados por defender a los dalits, incluido el entonces arzobispo de Delhi, el ya difunto Alan de Lastic.

"La Iglesia Católica en la India está profundamente triste por la detención de nuestros representantes del clero, que sólo pedían justicia y la igualdad para nuestros dalit cristianos y musulmanes", dijo el cardenal Oswald Gracias, arzobispo de Bombay (en la imagen). "El uso de la violencia contra los sacerdotes y religiosos es una vergüenza para la India. Nunca podrá desarrollarse una sociedad cuando parte de ella es objeto de discriminación a causa de su religión", añadió.

Al menos, el primer ministro de la India, Manmohan Sing, se disculpó este 12 de diciembre por la carga de policía del día anterior en las calles de Delhi cercanas al Parlamento, en la que con palos y cañones de agua sucia a presión los agentes golpearon a monjas, curas y manifestantes cristianos y de otras minorías que pedían respeto por los derechos de los dalia, despreciados por el sistema de castas hindú, informa Religión en Libertad.

En la India, los fundamentalistas hindúes se dedican a perseguir a las minorías religiosas. De hecho, recientemente, un niño de 7 años fue  brutalmente torturado y asesinado por fundamentalistas hindúes en la localidad de Rajasthan debido a su fe.

José Ángel Gutiérrez
joseangel@hispanidad.com