Visiblemente molesto, el presidente americano asegura que no le preocupa el número creciente de americanos que le consideran musulmán

Tal y como informara Hispanidad, un número creciente de norteamericanos considera tras el incidente de la mezquita de la Zona Cero y la debilidad de su política exterior en Irán, Iraq y Afganistán que el presidente Obama es musulmán. El inquilino de la Casa Blanca se ha visto obligado a responder y lo ha hecho de mala gana: Los hechos son los hechos  y por ellos no voy a estar perdiendo el tiempo en este asunto. Y no creo que los americanos quieran que yo me preocupe por este tema. Respecto a los rumores de que no había nacido en Estados Unidos, el presidente demócrata  ha afirmado que no puede pasar todo el tiempo con su certificado de nacimiento pegado en la frente.

La desconfianza de los americanos viene abonada por el hecho de su origen familiar, -su padre era musulmán- así como por su predicador, el reverendo Wright quien consideraba a todos los  soldados estadounidenses unos genocidas y que llegó a afirmar Dios maldiga América. Desde que Obama llegó a la Casa Blanca afirmó que estaba buscando una Iglesia. Al parecer, aún no la ha encontrado.

De cualquier forma, su malestar no le ha hecho hacer profesión cristiana, lo que habría aclarado todos los rumores.

Gabriel López

gabriel@hispanidad.com