Los judíos están llamados a jugar un papel fundamental en el futuro próximo. Lo cierto es que, como pueblo elegido -que lo fueron- siempre han jugado un papel fundamental.

Ahora, Netanyahu (en la imagen) convoca elecciones. El problema es que Netanyahu es más sionista que judío.

Ahora bien, el problema no consiste en que se rompa el Gobierno de Jerusalén: el problema es que se rompa el pueblo judío: entre hebreos y sionistas.   

En el mundo hay 14 millones de judíos, pero su importancia no es cuantitativa, se lo aseguro.

De entrada, solucionar el problema de los dos estados en paz y de Jerusalén, por la que pugnan israelíes y palestinos... olvidándose totalmente de los cristianos, condenados a huir.   

Hispanidad

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