• Son las veinte mujeres que secuestró hace una semana en un asentamiento nómada de la etnia fulani, en el norte del país.
  • Pero es que ayer Boko Haram mató a ocho personas en un nuevo ataque a una iglesia y hogares cristianos.
  • Y mantiene el secuestro de más de 200 niñas torturadas.
Lo de la secta yihadista Boko Haram en Nigeria está alcanzando cotas que deberían hacer plantearse a la ONU una intervención militar. Lo último que ha exigido es 800 vacas a cambio de liberar a las veinte mujeres que secuestró hace una semana en un asentamiento nómada de la etnia fulani, en el norte de Nigeria, informa  'Leadership'.

Los secuestradores exigen 40 vacas por cada mujer secuestrada, pero los fulani "dijeron que esa demanda es insostenible", señaló un policía de Maiduguri al periódico. "Los rebaños son el bien más preciado por los fulani, porque sin ellos no tendrían medios de subsistencia", explicó el oficial.

Pero es que, ayer miércoles, al menos ocho personas murieron en los ataques perpetrados por hombres armados contra una iglesia y hogares cristianos de dos localidades del estado de Plateau, ubicado en el centro de Nigeria, según informaron fuentes de seguridad. Y aunque de momento ningún grupo armado ha reivindicado la autoría de este ataque, se sospecha de los yihadistas de Boko Haram, porque es lo que vienen haciendo en los últimos años.

De hecho, desde que la Policía acabó en 2009 con el entonces líder de Boko Haram, Mohamed Yusuf, el grupo terrorista ha asesinado a 12.000 personas y ha herido a otras 8.000 en los últimos cinco años.

Y no olvidemos que estos yihadistas mantienen secuestradas a más de 200 niñas que están siendo torturadas ya solo por el hecho de haber sido hecho presas.  

Lo dicho: esto ya podría empezar a plantearse como una intervención militar humanitaria.

Andrés Velázquez
andres@hispanidad.com