• De esta forma, el equipo José María Castellano y César González Bueno pretenden reducir el número de despidos previstos -2.500- a la mitad.
  • Siguen los arbitrios sobre preferentes: y se ha llegado a un acuerdo con 13.000 de los 40.000 afectados.
  • Cuando se cumplan estas dos condiciones de la Troika, un grupo de fondos comprará el 100% del capital.

José María Castellano, presidente de Nova Galicia Banco (NGB) y su segundo, César González Bueno (en la imagen), propondrán a los sindicatos abrir durante todo el día las 600 sucursales del Grupo.

Sería así el primer banco español en abrir todas sus sucursales de ocho de la mañana a ocho de la tarde. Pero para ello hay que llegar a un acuerdo con los sindicatos que en la mañana del martes volvían a echarse a la calle por el ERE (2.600 personas) exigido por la Troika comunitaria al FROB, principal accionista de la compañía.

En NGB consideran que se podrían reducir los despidos a la mitad con dicha ampliación del horario de apertura, además de sacarle más rendimiento a los locales.

Al mismo tiempo, otra de las exigencias de la Troika, las preferentes, continúa con su proceso negociador. Para ser exactos, de los 40.000 afectados ya se ha llegado a un acuerdo -la mayor parte devolución del dinero- mediante laudo con 13.000 preferentistas. Quedan, por tanto, 30.000. En dinero, eso significa que ya se han solucionado 240 de los 937 millones invertidos, camino ya de la decisión final, que será la conversión en acciones donde, como exigió Bruselas, 'debe haber pérdidas'.

El criterio a aplicar es el mismo de los tribunales: aquel preferentista que acepte el laudo renuncia a acudir al juzgado y un árbitro le examina sobre 9 criterios: su cultura general, su cultura financiera, si ha invertido en bolsa, etc. Y ahí se toma la decisión. En resumen, se trata de distinguir entre ahorradores e inversores.

Y es que los que no acudan al laudo se verán inmersos en la conversión en acciones y, entonces, ya saben que Europa exige que el preferentista pierda algo, al menos el preferentista con cultura financiera, una pérdida que no debería bajar del 40% de la inversión.

Al final, todo indica que Castellano y Bueno van a sacar adelante su proyecto de NGB no sea absorbido para nadie y se quede como el único banco gallego. En cuanto se aplica el memorándum (es decir, acuerdo laboral y con preferentistas), un grupo de fondos, inversores institucionales, le comprará al Estado el 100% de las acciones.

Una mala noticia para el presidente del BBVA, Francisco González, empeñado en hacerse con NGB, el banco de su pueblo.

Eulogio López

eulogio@hispanidad.com