El banco vasco, entonces líder de España por capitalización, vale ahora menos de la mitad que el Santander.
No se pierdan la siguiente información de Invertia sobre el caso que fue conocido como las cuentas ocultas de Jersey.
Es un gran resumen que voy a tratar de compendiar algo más. Cuentas ocultas en Jersey paga sobresueldos a consejeros que desconocían su procedencia. Emilio Ybarra, entonces co-presidente del BBVA como Francisco González (FG), decide regularizar una situación fiscalmente opaca, pagando los correspondientes impuestos. Se lo comunica -nobleza obliga- a FG y éste, en lugar de aplaudir la regularización, se chiva al Banco de España controlado entonces por el Gobierno Aznar. De inmediato, se arma la marimonera: expedientes y de la autoridad monetaria y juicios paralelos. FG aprovecha el asunto para echar a Emilio Ybarra y quedarse como presidente único, además de a otros 16 consejeros, entre los que se encontraba Alfonso Cortina, entonces presidente de Repsol, Juan Entrecanales o los representantes de Alicia Koplowitz, así como todos los apellidos de Neguri. Se trataba de españolizar el BBVA y se trataba sobre todo, de que FG se convirtiera en presidente omnímodo.
Al final no pasó nada: Emilio Ybarra y compañías fueron absueltos por los tribunales y hasta por la Hacienda pública, y el expediente del Banco de España quedó en nada, pero el objetivo de FG se había cumplido: había expulsado a todos aquéllos que podían hacerle sombra, fueran familias del viejo Neguri o fueran ejecutivos de la entidad.
Eso ocurría a principios de 2002. Por aquel entonces, el BBVA era líder por capitalización. Ahora, el BBVA se sitúa en los 40.000 millones de euros, la mitad que cuando FG accedió a la Presidencia, mientras su principal competidor del Santander vale más del doble: 85.000 millones. Es lo que podríamos denominar una sabia utilización la información, del Banco de España y de los tribunales de Justicia.
Eulogio López
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