García-Page, líder del socialismo manchego, ha perdido los papeles al irse al Tribunal Constitucional y calificar de pucherazo electoral la medida de Dolores de Cospedal de reducir el número de diputados autonómicos de 49 a 33.

¿De qué pucherazo hablamos Lo que quieren los ciudadanos con sentido común es que se reduzca el número de instituciones públicas, el número de funcionarios públicos y, sobre todo, el número de políticos, que en España son una legión. ¿Qué tiene que ver eso con un pucherazo De otros socialistas, un Madina, un Sánchez, un Iceta, un Rubalcaba, una Soraya Rodríguez, una Valenciano, podía esperarse esa salida de pata de banco. De García-Page no me lo esperaba.

Es más, Cospedal se ha quedado corta. De hecho, no tengo claro para qué sirven los parlamentos autonómicos, como no sea para alimentar el onanismo intelectual de la clase política, que vive de insultar al del banco de enfrente. Que España no es tan grande, caramba. Bastaría con autonomías presidencialistas o con estructura de ayuntamiento. A fin de cuentas, la gente vota tanto personas como partidos, pero con el sistema de listas cerradas se nos cuelan politicastros, a los que cuando hablas de servicio al bien común exhiben una sonrisa de conejo.  

Y si tienen que existir diputados autonómicos que trabajen sin cobrar, por servicio público y sin prebendas de ningún tipo Por ejemplo, el privilegio del aforamiento.

Cospedal ha reducido poco los diputados y poco sus emolumentos. Su decisión es de las pocas medidas regeneradoras puestas en marcha por el Partido Popular. Sólo que se ha quedado corta.

Eulogio López

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