Sr. Director:

Tengo miedo. Si, miedo de verdad al pensar que en el país en el que vivo, un asesino de niños inocentes, además de adultos también inocentes, puede quedar en libertad tras sólo 18 años de cárcel, cuando su condena ascendía a 3000 años. Tengo miedo porque salgo a la calle, trabajo y vuelvo a casa a ver a mi mujer y mis tres hijos, los cuales corren peligro con desalmados como ese en la calle.

Sólo pido que reine la cordura y que se evite esta injusticia brutal. Espero que los políticos que gobiernan este país no permitan que se viole nuestra libertad para salir a la calle con tranquilidad. Si yo tengo miedo, no quiero pensar qué estarán pensando las familias de las víctimas inocentes de este monstruo. Desde aquí, me uno a ellos en su dolor y rezo por sus familiares.

Gabriel Tourné

gabriel.t@telefonica.net