No hay peor forma de enfrentarse a un problema que negarlo. Y tal parece ser la estrategia de Cándido Méndez en relación a la deslocalización industrial. Según sus datos, en 2003, la inversión extranjera siguió llegando a los 15 estados de la antigua UE en un 96%. Incluso hubo una pequeña bajada coyuntural en los países del Este, señaló. Además, según los datos de Méndez, las inversiones internas entre la UE15 es 26 veces superior a la existente en el Este.

Más datos: entre los 10 países que más exportan, 6 son europeos y encabeza la lista Alemania, con un saldo neto por habitante de 1500 dólares por habitante, frente a los 20 de China o el déficit de India. Y además, Méndez se ha mostrado muy crítico con EDF que compra en los países del Este Europeo y despide plantillas sin respetar los derechos laborales. En resumen: según Méndez, la amenaza deslocalizadora es relativa.

Que se lo digan a los empleados de SETA que están viendo seriamente amenazados sus puestos de trabajo. Méndez reconoce que el problema es gravísimo, aunque añade que el problema de SETA es de política tecnológica y marketing y no de exceso de personal, por eso nos oponemos al despido

Por otra parte, el secretario general de UGT, Cándido Méndez, sostiene que los convenios colectivos son suficientemente flexibles, que el 75% de ellos son empresariales y que ha dado muestras de adaptabilidad desde un espacio autárquico a la apertura de la UE. Somos la 2ª economía más abierta del mundo y hemos adaptado nuestros convenios colectivos a esa realidad, señala Méndez, quien se muestra abierto al cambio, siempre desde el reconocimiento del buen funcionamiento de la negociación colectiva.