Sr. Director:
El bloqueo decretado por Vladimir Putin a las importaciones agropecuarias procedentes de la Unión Europea es una represalia política que no puede abordarse desde las reglas habituales del comercio.

La Comisión Europea dispone, tras la reforma del reglamento de la PAC, de herramientas suficientes para limitar el daño a los agricultores afectados, pero también para llevar al ánimo de terceros países la inconveniencia de aprovechar los acuerdos preferenciales concedidos por Bruselas para hacer competencia desleal.

Martínez Madrid