Miguel Sebastián da marcha atrás en la sangría de la energía verde y enfada a todas las partes
 

El Congreso de los Diputados aprobará previsiblemente el real decreto que busca resolver el problema del déficit de tarifa del sistema eléctrico con el apoyo de PNV y la abstención de CiU. De esta manera se sigue con la política social-nacionalista que tantos resultados le está dando al Gobierno.
Sin embargo, esta marcha atrás por parte del ministro de Industria Miguel Sebastián lo único que está logrando es enfadar a todas las partes. Por un lado a los empresarios de la energía fotovoltáica a los que prometió mucho y ahora les niega parte de lo prometido (y encima, con carácter retroactivo), pero también a las compañías eléctricas, aunque éstas le hayan mostrado su apoyo al ministros, ya que sigue jorobando al gas y al ciclo combinado, y además, también tienen energía renovable.
De esta manera se frena un poco la política de energía verde que tanto ha defendido el Gobierno por su insostenibilidad, pero no se detiene el problema del déficit tarifario, que como desde el mismo ministerio se anunciado, es de sólo 17.000 millones de euros; déficit que se subsanará con deuda avalada por el Estado y cuyos intereses pagaremos todos los ciudadanos.
Juan María Piñero
juanmaria@hispanidad.com