Aunque Montilla se niega a aceptarlo, la hoja de ruta del acuerdo Zapatero-Mas se cumple punto por punto. El candidato de CiU, Artur Más, se compromete a no formar gobierno si no ganan las elecciones, afirma que no buscará un apoyo con el PP, exige el cumplimiento del Estatut y el reconocimiento español de la nación española, considera que el PSC se ha descatalanizado y defiende una economía creativa.

No acepta otra cosa que la presidencia de la Generalitat. Incluso se le llega a escapar que su objetivo político es recuperar el gobierno regional. Es Artur Mas, el candidato de CiU a la presidencia de la Generalitat que en la mañana de este martes comparecía en los desayunos de Europa Press. Lo tiene muy claro : No haremos un pacto de perdedores en clara referencia al pacto del Tinell que les arrebató el gobierno catalán.

Su compromiso es claro : Sólo formarán gobierno si son la formación ganadora. Claro que ganador para Mas es obtener más escaños, no más votos. Porque en las últimas catalanas siempre ha ocurrido lo mismo : el PSC gana en votos y CiU en escaños. Los catalanistas dicen que esto es un partido de tenis y que lo importante es ganar en sets, no en tantos. Los socialistas responden que debería de ser como en fútbol, lo importante son los votos. Pero en todo caso, el sistema es el sistema, aunque sea perfectible. Y Mas insiste en que nadie más que él ha hecho esta oferta de sólo gobernar si es la lista más votada, porque en el fondo, el tripartito tratará de reeditar el acuerdo. Y es que, efectivamente, desde el PSC aseguran a Hispanidad que no están dispuestos a seguir los criterios marcados por Moncloa y que accederán a la Generalitat si les dan los números. O sea, que Montilla no acepta ser conseller en cap.

¿Habrá acuerdo entre CiU y el PP? Más lo desmiente de manera tajante. Ni aunque lo necesitemos. Y es que los catalanistas están muy molestos con que el PP haya presentado el recurso de inconstitucionalidad. No habrá acuerdo estable y permanente. ¿Y un acuerdo de investidura? Nosotros no somos el PP y no sabemos si nos apoyarían a nosotros o al Sr. Montilla, señala Mas lanzando balones de fuera. Pero el PP tenía en el lugar del desayuno tres destacados dirigentes. Y eso es más que cortesía a la que se refirió Mas.

¿Y qué pasa con la posibilidad de entrar en el gobierno nacional? Mas trata de evitar la pregunta porque insiste que en las elecciones catalanas se decide el gobierno catalán, pero responde afirmando que su prioridad absoluta es Cataluña, es nuestra razón de ser y que por tanto, si no regresan a Sant Jaume, no habrá posibilidad de seguir adelante en su compromiso con el Gobierno estatal. Si hay juego limpio y se respeta que gobierne la lista ganadora insiste Mas en su advertencia- todo será posible. Y más insistencia. Así quedó pactado en acuerdos al más alto nivel, señala en clara referencia al acuerdo Zapatero-Mas. En tal caso, si los catalanistas recuperan el gobierno regional, entonces queda intacta su voluntad de implicarse en la política española, no como espectador, sino implicarse a fondo.

Más cosas: ¿Van a apoyar al PSOE en la negociación presupuestaria? De momento, Mas dice que deben de comprobar que en las cuentas públicas figuran los compromisos ya contraídos: inversiones en Cataluña equivalentes a su aportación al PIB, reformas en el IRPF y sociedades y alguna cosa más. ¿Qué cosas? No contesta. No me corresponde. Pero deja claro que el acuerdo presupuestario no va a salir gratis, porque los convergentes no quieren presentarse a las elecciones manchados  por su acuerdo con el PSC.

Por otra parte, Mas ha reclamado el cumplimiento del Estatut para no crear frustraciones y generar entusiasmo, porque sino, en pocos años el remedio no habrá servido para nada y la situación estará peor. Y más advertencias: no con generosidad sino con lealtad, y sentido de Estado para aplicar el Estatut. Es decir, cuidadín con no desplegar todas sus potencialidades porque esta es también nuestra exigencia.

Por cierto que para recuperar una buna relación entre Cataluña y España Mas se compromete a gobernar bien y frenar a aquellos que han utilizado Cataluña para beneficios electorales, es decir, mantener a raya a ERC. A cambio, España también tiene que hacer sus deberes: aceptar a Cataluña tal y como es, con su personalidad política y cultural, sin intentar domesticarla y aceptando que es una nación como señala una Ley Orgánica aprobada por las Cortes españolas.

Por último, Mas propone avanzar hacia una economía creativa, es decir una puesta al día que avance hacia más inversión, menos consumo, recorte del déficit exterior y mejora de competitividad. Casualmente los mismos objetivos de un partido socialista al que califica de menos catalanista. No lo digo yo, yo lo dicen ellos y se han producido ciertas bajas en los últimos días, señala con cierta mala leche en relación a los comentarios de Ernest Maragall y la baja de la mujer de Pasqual Maragall.