El líder convergente, Artur Mas, mostró, en la mañana del miércoles 2, su crítica a la polémica desatada por el presidente catalán, Pasquall Maragall, en torno a la reforma del artículo 2 de la Constitución Española. No somos sospechosos de no querer trabajar por un modelo de Estado plurinacional, plurilingüístico y pluricultural, señala Mas.  

La crítica, sin embargo, viene porque Mas entiende que la polémica resulta un tanto estéril y distrae la atención de lo que verdaderamente importa: el nuevo sistema financiero. Venir a proponer estas cosas cuando nuestros retos son otros, es ponérselo fácil para que te digan que no, señaló en el desayuno organizado por el Foro Nueva Economía. Mas hace sangre porque Blanco tardó menos de 24 horas en mostrar su abierta oposición. Más tarde, sin embargo, señala que PSOE y PSC son la misma cosa. O sea, el juego de la ambigüedad propio y tradicional del nacionalismo catalán. 

No obstante, Mas insiste en que Cataluña es una nación que pertenece a un Estado que debe configurarse como plurinacional y que eso quedará reflejado en el nuevo Esta>