Ya sé que han visto decenas de películas de perros, les confieso que yo también, pero Marmaduke me parece una comedia divertida para un público infantil.
Narrada en primera persona (disculpen, primer chucho), cuenta las aventuras de un gran danés llamado Marmaduke, que no acaba de encajar (debido a su formidable tamaño) y que espera encontrar su lugar en el mundo cuando la familia con la que habita se traslada a California debido a un cambio de trabajo del progenitor
Marmaduke ha saltado a la gran pantalla desde una famosa tira cómica (de Brad Anderson y Phil Leeming) que llegó a publicarse en 600 periódicos, de más de 20 países, desde mediados de los años 50 hasta finales de los 60. Su traslación a imágenes está bien conseguida porque está repleta de gags (puro slapstick) y de diálogos graciosos (Marmaduke es un gran charlatán). Así, mediante este cómic canino descubrimos que hay algunos canes que llevan a gala su pedigrí, que los gatos no son enemigos de todos perros y que, éstos últimos, si son osados, pueden convertirse en avezados surfistasLógicamente todo esto se consigue con imágenes reales mezcladas perfectamente con otras generadas por ordenador.
Para: Niños que quieran hacer unas risas
