¿Por qué el ministro de Exteriores, José Manuel García Margallo (en la imagen), ha cambiado tanto respecto a Cataluña Porque así se lo ha ordenado Rajoy y porque Artur Mas le ha decepcionado.

Una Cataluña independiente estaría "condenada a vagar por el espacio y fuera de la Unión Europea por los siglos de los siglos". Esto es lo que ha dicho el ministro de Exteriores, cuyo estado de salud le ha impedido estar en la carrera por la Presidencia de la Comisión Europea por los populares europeos.

Lo curioso es que, hasta ahora, Margallo era, en el seno del Gobierno Rajoy, el más catalanista, partidario del diálogo con la Generalitat, mientras la vicepresidenta, Soraya Sáenz de Santamaría, optaba por la línea dura: no ceder ante Artur Mas.

Pero el cambio ha llegado y, con él, la ruptura, al parecer definitiva, entre Madrid y Barcelona, aunque lo permanente en política siempre es transitorio. Rajoy ha optado aquí por las tesis de Soraya y ha obligado a Margallo a seguirle.

Pero es que además, al ministro más catalanista le ha decepcionado profundamente la actitud Artur Mas: un verdugo empeñado en convertirse en víctima. Durante las discretas negociaciones de los hombres de Margallo con los de Mas, el ministro, entonces más fuerte, estaba dispuesto a ceder, tanto en materia económica como política. Pero exigía el 'prou', esto es, que la Generalitat se diera por contenta con lo conseguido y dejara de reivindicar nuevos avances. Ese 'prou', según la gente de Margallo, nunca llegó. Y así, decía uno de los hombres de confianza del ministro, "no hay manera de negociar nada".

¿Y entonces Pues entonces seguimos en las mismas. Ni Rajoy ni Mas ceden, pero se demuestra que quien debe mover ficha es Mas. Bastaría con que dijera hasta dónde quiere llegar. Y ahora Margallo tira la toalla.

Fue la misma pregunta que Felipe González, entonces presidente del Gobierno, le planteó al nacionalista, y entonces lehendakari, Carlos Garaicoechea: ¿Hasta dónde queréis llegar La respuesta de Garaicoechea cabreó a González: "Presidente, este es un proceso histórico". En efecto, histórico por interminable.

Eulogio López

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