El sindicato de funcionarios Manos Limpias ha presentado un escrito al Consejo General del Poder Judicial (CGPJ) en el que insta a este organismo a abrir diligencias previas para investigar las filtraciones salidas del Juzgado nº 32, que se encarga del Caso Alierta". Según Manos Limpias, su titular, Santiago Torres, podría ser responsable de las filtraciones producidas en su Juzgado, utilizadas con fines "espurios" del abogado querellante, José María Davó.

Conviene recordar que tras la publicación en la revista Época del plan de chantaje y extorsión de Davó a través de la asociación AUGE, ahora el mismo letrado ha decidido reabrir la causa bajo el paraguas de la asociación AINCO (se sigue rogando no hacer rimas fáciles). Una Asociación considerada "fantasma" por el secretario de Manos Limpias, Miguel Bernat

Además, Manos Limpias considera que podría haber intereses políticos detrás de la admisión de la querella y las filtraciones del juez Torres, que "podría buscar compensaciones profesionales por parte de los posibles patrocinadores de Davó". No obstante, Bernat matiza que se trata de una mera interpretación y que su actuación obedece a los requerimientos recibidos por parte de funcionarios del Juzgado nº 32, así como por abogados y procuradores que lamentan que el "Caso Alierta" haya asumido prioridad sobre otros asuntos conocidos en dicho Juzgado. 

Así las cosas, la Comisión disciplinaria del CGPJ deberá resolver en el plazo máximo de 15 días el requerimiento de Manos Limpias. Si estima que existen indicios racionales de irregularidad, abrirá un expediente disciplinario contra el juez. En caso contrario, Manos Limpias anuncia que recurriría para que fuera el Pleno del CGPJ quien se tenga que manifestar sobre las presuntas irregularidades.