José Oliú es el único que se lo está tomando en serio. Todas las ofertas -jueves 24 fecha límite- estarán condicionadas a las ayudas públicas

 

La peor, la del BBVA, que prefiere Catalunya Caixa. Y luego hay que encajar en la operación el fondo norteamericano Flowers Powers.

El gobernador del Banco de España. Miguel Ángel Fernández Ordóñez (MAFO), tiene prisa en dar carpetazo al asunto Caja de Ahorros de Mediterráneo (CAM) antes de que Mariano Rajoy llegue a Moncloa. Al menos que no le puedan echar encima ese marrón, eso sí, la da carpetazo a su manera que por ahora ha resultado muy cara y lo resultará aún más... en un futuro próximo.En primer lugar, MAFO ha forzado a que se presenten entidades que no tiene el menor interés en hacerse con la CAM, como Caixabank. Por tanto, la entidad catalana presentará una oferta que, como todas, estará llena de condicionantes pero oferta para perder. El BBVA no muestra interés alguno y aún no sabe si retará al Banco de España con la espantada. Podría ser. En cualquier caso, a FG sólo le interesa Catalunya Caixa o Catalunya Banc, para aumentar su presencia en Cataluña. La CAM no le dice nada.

El más interesado es el Sabadell, pues José Oliú está rabioso tras haber perdido el Pastor, que acabó en manos del Popular.

Por su parte, el Santander hará valer su liderazgo para exigir más ayudas públicas que nadie si MAFO quiere que sea Banesto quien se haga cargo de la CAM.

Y luego hay que ver qué se hace con Flowers Powers, el poderoso fondo de inversión norteamericano: cederle el control total de una entidad española podría resultar curioso. Su papel lógico parece ser el de acompañante. También de Ibercaja, una de las cajas más solventes, y eterna candidata a la CAM pero a la que ahora parece interesarle más Unnim.

Y si soluciona -a cualquier cosa le llaman solucionar- el asunto CAM, a lo mejor MAFO puede afrontar la nueva fase de reconversión bancaria, que le está resultando carísima al erario público y peligroso al Tesoro público.

Miriam Prat

miriam@hispanidad.com