Sr. Director:
El paro bajó en mayo en 30.113 personas y la afiliación a la Seguridad Social subió en 77.400.

Son noticias positivas, pero suficiente para alimentar falsas expectativas. La realidad sigue siendo cruel: hay más de 4,5 millones de parados. No caben triunfalismos ni fatalismos, sólo realismo para aplicar las reformas y ganar en competitividad.

De ahí que atribuir a la reforma laboral toda suerte de males, como sistemáticamente hacen desde la izquierda y los sindicalistas, es una necedad. Hay que reconocer que sin cambiar las estructuras que nos han llevado a esta dura situación jamás se crearán puestos de trabajo.

Suso do Madrid