Sr. Director:
Los ediles socialistas presentan en Sevilla una moción dudando de la capacidad del PP para mantener el estado de bienestar (¿el de sus viajes y comilonas?).

 

A la vez se erigen en adalides de un sistema de dependencia bien consolidado (¿será por las 21 mil personas dependientes que murieron el año pasado mientras estaban en listas de espera?). En ese mismo pleno insultan a Zoido por apoyar las políticas de Cáritas y de las Hermanitas de los Pobres porque este tipo de instituciones sustituye solidaridad por caridad y servicios sociales por beneficencia (800 mil personas que comen todos los días gracias a Cáritas estarán muy preocupados pensando si es por solidaridad o por beneficencia).

Otro titular de ABC: La Junta cierra los albergues y deja en la calle a cientos de inmigrantes en Jaén. Un equipo de Cáritas encontró en una noche a 54 personas acurrucadas en cajeros y en la puerta del albergue y les dieron mantas y comida caliente. ¿Por solidaridad o por beneficencia?

Y otro más: Córdoba exige laicidad a grupos de mujeres para acceder a ayudas y Rafaela Pastor puntualiza: que las miembras de las asociaciones sean mujeres que no representen a alguna iglesia. Esta señora ha ido directa al grano. ¡Cómo les duele que la Iglesia Católica y las familias -esas dos instituciones tan molestas para sus intereses -sean una vez más las que están sacando adelante a todos los juguetes rotos que ellos dejan por el camino! Para su información les digo que en la Iglesia Católica jamás se habla de solidaridad o de beneficencia y sí y mucho de Justicia.

Por cierto, las migajas que nos han quedado de la Deuda Histórica ¿son caridad o beneficencia?

Victoria Blasco López