Es lo que ha escrito en su Facebook, una red social muy apropiada para el pensamiento veloz en intensidad y corto en alance de la cabeza de lista de Rubalcaba al Europarlamento.

Y en verdad que el asunto es preocupante. Digo, si a los obispos empiezan a gustarles las mujeres los cristianos tendríamos un problema de gran hondura teológica.

El mensaje de doña Elena (en la imagen) tiene más recorrido.

Por ejemplo, cuando se empeña en que si sale adelante la horrible ley del PP no habrá abortos seguros en España. Esto es como lo de los obispos ineptos por el amor al bello sexo. Decir aborto seguro es como decir feminista inteligente, especialmente desde el punto de vista del nasciturus.

Pero la conclusión intelectual de Valenciano va mucho más allá: lo que ocurre, la razón última, lo que todo lo explica, es que los obispos que defienden al nasciturus… no amaban a las mujeres.

Mira, Valenciano, que seas una abortera pase, pero que seas una abortera cursi, por ahí no paso. Esta chica ha conseguido ser más simple que un repollo y más cursi que un repollo con lazo. 

Eulogio López

eulogio@hispanidad.com