Sr. Director:
Los obispos españoles afirman, en la más que meditada Declaración sobre la posible ley del aborto, que de aprobarse, ésta ley supondría un serio retroceso en la protección de la vida de los que van a nacer, un mayor abandono de las madres gestantes y, en definitiva, uno daño muy serio al bien común, no creo que esto sea para rasgarse la vestiduras, es más que evidente.

Pero el aspecto más sombrío del proyecto de ley es el de calificar el aborto como un derecho, cuando la primera obligación del Estado es justo lo contrario: proteger la vida. A este respecto la declaración subraya que ese derecho, no es ni puede ser una concesión del Estado, a quien recuerda que carece de toda autoridad para establecer un plazo dentro del cual el aborto deje de ser un atentado a la vida.

Los obispos denuncian otras falsedades contenidas en el anteproyecto, entre ellas considerar el aborto como un medio para cuidar la salud de la mujer o la presentación del aborto como un asunto privado, además de imponer una determinada educación moral y sexual que nunca servirá para prevenir los abortos. No tengo espacio para hacer un análisis más profundo pero por lo que parece con esta declaración, la Iglesia defiende a una sociedad que tiene todo el derecho a contar con leyes justas y a que no confundan la injusticia con un derecho.

Xus Do Mar

xusdomar@gmail.com