• El ministro español Margallo permitió el aterrizaje del avión en territorio español (Islas Canarias).
  • Los presidentes de Argentina, Ecuador, Uruguay y Venezuela se reúnen hoy jueves en Cochabamba para apoyar a su colega Morales tras el incidente con su avión en Europa.
  • Morales llega a Bolivia tras la crisis abierta con Europa: "Nunca nos van a amedrentar". En el entretanto, crece el odio hacia EEUU entre los países bolivarianos.
El presidente boliviano, Evo Morales (en la imagen), ha llegado finalmente cerca de la medianoche a Bolivia, tras un accidentado viaje por Europa, después de que Francia, Italia y Portugal negaran a su avión el paso por su espacio aéreo ante las sospechas de que trasladaba al ex analista de la CIA Edward Snowden.

Algunas informaciones han señalado que España también le prohibió el paso por su espacio aéreo, pero el ministro español de Exteriores, José Manuel García Margallo, lo ha negado y también ha negado que España solicitase "registrar el avión". Según Margallo, "no hubo prohibición" sino que el Gobierno español dio una autorización para que Morales hiciera escala en las Islas Canarias, pero el avión "no aterrizó en el plazo previsto", sino que se desvió a Viena. Posteriormente, ha proseguido Margallo, "si ha habido dificultades posteriores ha sido como consecuencia de autorizaciones para sobrevolar espacios aéreos que no son el español", ha incidido.

Es más, el titular de Exteriores ha explicado que durante toda la noche ha mantenido contactos con sus socios europeos y aliados así como las autoridades bolivianas "para allanar el camino para que pudiese aterrizar en Las Palmas". Margallo no ha querido entrar en detalles sobre los contactos que ha mantenido y que le han tenido "toda la noche sin dormir" porque son "secreto de sumario", pero sí ha recalcado que se ha trabajado para que "el avión pudiese hacer escala en los términos que se habían previsto".

Según la prensa, el incidente se debió a las "presiones" de Estados Unidos, de donde partieron las sospechas de la posible presencia de Snowden en el avión de Morales. Este miércoles, hipócritamente, el portavoz del departamento de Estado de Estados Unidos, Jen Psaki, aseguró que "las decisiones fueron tomadas por países individuales y deberían preguntar a ellos por qué toman esas decisiones".

Sin embargo, el mosqueo de los países hispanoamericanos con Europa y con EEUU es considerable. Los presidentes de Argentina, Ecuador, Venezuela, Uruguay y Cuba hicieron llegar al Gobierno boliviano sus expresiones de solidaridad y, a la vez, el repudio a las maniobras de Francia, Italia y Portugal al cancelar los permisos al avión presidencial.

Tanto es así que los presidentes de algunos países de la Unasur -los de Argentina, Ecuador, Uruguay, Perú y Venezuela- se reúnen de emergencia este jueves en la ciudad boliviana de Cochabamba, tras el incidente. Aunque todavía no se conoce públicamente la posición de Brasil, Colombia y Chile, que también integran la Unión de Naciones Suramericanas (Unasur).

Como no podía ser de otra forma, el ecuatoriano Rafael Correa sacó a relucir el pasado  -del que deberían enorgullecerse, por cierto-  y comentó que "algunos europeos creen que todavía estamos en la época de la colonización y del avasallamiento de los pueblos americanos". Por su parte, el presidente de Venezuela, Nicolás Maduro, señaló: "Estoy en contacto con Evo, se han violado todas las inmunidades internacionales que protegen a los jefes de Estado por la obsesión imperial".

Pero ni una palabra de agradecimiento a España, que -por la mediación de Margallo- se ha portado de manera solidaria con el presidente de un país hermano, Bolivia. Lástima. ¿Cuándo comprenderán algunos dirigentes hispanoamericanos que es mejor destacar lo que nos une que lo que nos separa ¿Cuándo se quedarán con lo bueno que del legado que les dejó España

José Ángel Gutiérrez
joseangel@hispanidad.com