Los grandes vendedores de armas en el mundo son Estados Unidos, Rusia, Reino Unido, Francia y Alemania, aunque, siempre hay que advertirlo, no se proporcionan cifras sobre China, porque Pekín no las facilita. Es una de las dos grandes conclusiones del informe del Instituto para la Búsqueda Internacional de la Paz, con sede en Estocolmo, recogido por la agencia Zenit. De cualquier forma, la opacidad de muchos gobiernos hace sospecha a los autores del estudio que probablemente los países citados figuren a la cabeza por dos razones. Informan sobre sus ventas reales debido al control parlamentario salvo en Rusia- y venden armamento sofisticado, mucho más controlado, y no armas ligeras, que son las que originan las principales matanzas en el Tercer Mundo.

La segunda conclusión del Informe es que la reducción en gasto armamentístico tras el final de la Guerra fría (1989) ha sufrido ahora una corrección al alza, y el punto de inflexión puede situarse en 1998. Desde esa fecha, el bazar de las armas crece de forma mantenida y goza de buena salud económica. (Ver resumen de Zenit sobre el informe).