España importó productos cárnicos por valor de 15,85 millones de euros el año pasado en detrimento de los productores españoles

-Adolfo Alcalde, de ASAJA: "Es Europa quien tendría que mojarse y apoyar las sanciones arancelarias".

-Nuestro país está atado de pies y manos. Dependemos de la cifra del contingente de importación que se dicta desde Europa.



Desde hace mucho tiempo, los ganaderos españoles vienen quejándose de la supuesta competencia desleal que se ejerce en el sector por culpa de las importaciones masivas de carne argentina. Durante el año pasado se importaron a España productos cárnicos argentinos por valor de 15,85 millones de euros, frente a los cerca de dos millones de euros que se exportaron al país cuyos destinos rige Cristina Fernández de Kirchner. La balanza de pagos en este epígrafe es negativa para España en 13,85 millones de euros.

Según Adolfo Alcalde, responsable de ganadería de ASAJA  -quien señala que hay que ser cauto porque "las  medidas sobre los contingentes de importación dependen de la Unión Europea"-, las quejas de muchos ganaderos sobre las importaciones de carne argentina no son oportunistas ni surgidas al rebufo del escándalo de la expropiación de YPF: "La importación está contingentada desde la Unión Europea, y llega mucha cantidad de carne argentina a nuestro país que hace daño a nuestras propias producciónes, máximo teniendo en cuenta que no se les exige a los productores argentinos lo mismo que a los españoles y al resto de los europeos en materia de producción, como puede ser las normas de bienestar animal, la no utilización de hormonas, etc.".

Señala Adolfo Alcalde que lo mismo ocurre con las garantías que se exigen sobre las condiciones de los trabajadores y de las empresas, "como pueden ser los costes laborales y los impuestos". Por ello, afirma, pueden vender más barato; "no estamos en igualdad de condiciones. A ellos no se les exige lo mismo que al resto de los ganaderos europeos".

En el sector ganadero español prefieren optar por una posición de cautela ante la situación que ha creado la expropiación de YPF: "No depende de nuestro Gobierno adoptar medidas arancelarias o sanciones, o bloquear las importaciones, sino a Europa. Tendrían que ser nuestros socios los que se mojaran, y parece muy difícil que se llegue a un acuerdo en ese sentido. España está atada de pies y manos y no puede tomar medidas unilaterales en ese sentido. Habrá que esperar", ha concluido.
Sara Olivo
sara@hispanidad.com