Desde la patronal se observa con bastante escepticismo la rebaja de impuestos anunciada por el Gobierno. Más que nada porque todos los gobiernos caen en la tentación de subir los impuestos. Por otra parte, Solbes advirtió que más que rebaja habría que hablar de reforma. Y eso, ya saben, mientras MAFO sostiene que lo servido será superior a lo comido. Además, Cuevas considera que la eliminación de la deducción por I D puede hacer que para algunas empresas la presión fiscal se vea sustancialmente elevada.

Pero lo más importante. La CEOE sigue esperando información detallada sobre los sugeridos impuestos medioambientales, no vaya a ser que la rebaja fiscal se convierta en una elevación de la presión fiscal. Tampoco sabemos nada del IRPF, estamos en tanteo o en una partida de mus. Jugando con cartas, pero sin ver las del equipo contrario, suponemos. ¿Cuál es la pareja de la CEOE? Me temo que es fácilmente adivinable. Deberíamos de saber de qué estamos hablando para poder sumar y dividir, concluye Cuevas. Y es que la estrategia de este Gobierno es tirar para adelante primero y después anunciar su voluntad de diálogo. Una voluntad muy poco creíble, la verdad.