La doble A no fue galardonada en la Gala de las Medallas del CEC que repartió premios entre Celda 211 y El Secreto de sus ojos

 

Como cada año, el Círculo de Escritores Cinematográficos (CEC) celebró su Gala anual de cine en la que se valora a la producción cinematográfica española de 2009. La entrega de las ya tradicionales Medallas CEC se desarrolló en el cine Palafox de Madrid durante la noche de este lunes.

El acto resultó ameno y entretenido gracias a la profesionalidad de sus dos presentadores, Manuela Velasco y Luis Zahera, que aportaron anécdotas en torno al director de cine John Houston, entre premio y premio. 

Este año el CEC premió a dos grandes cintas: Celda 211, de Daniel Monzón y El secreto de sus ojos, de Juan José Campanella. Las dos películas acapararon los premios principales con cinco galardones para la primera y cuatro para la segunda. Además Concha Velasco fue la gran protagonista al recibir la Medalla de Honor a toda una trayectoria.

La Gala se caracterizó por su sobriedad. No hubo música, ni imágenes ni show de ningún tipo. (Salvo el cha-cha-chá que bailó la homenajeada con su hermano Manolo, igual que la primera vez que bailaron juntos para celebrar la primera Medalla CEC de Concha a sus 18 años por su trabajo en Las chicas de la cruz roja). Por su parte la presentadora, Manuela Velasco, sobrina de la agasajada, se permitió una broma al echar la culpa a la SGAE de no poner la música de las películas candidatas a cada categoría.

Pero la Gala tuvo también otros momentos sorprendentes. Uno de ellos lo protagonizó Borja Cobeaga, director de Pagafantas, que subió a recoger el premio al Mejor Guión. Lo curioso es que lo hizo para cubrir a David Planell, director de La vergüenza, que fue el ganador del premio. Cobeaga en el escenario no se anduvo con pelos en la lengua: Si es que soy un perdedor y David me ha dicho que si ganaba, yo recogiera su premio.

El director de Celda 211, Daniel Monzón, subió por partida doble al escenario. Primero para recoger la Medalla de Mejor Actor concedida a Luis Tosar que, pese a no encontrase en la sala, gracias a una llamada de móvil dedicó unas palabras al público asistente, y después para recibir el premio al Mejor Director. La película además recibió las Medallas CEC a Mejor Película, Mejor Montaje (Cristina Pastor) y Mejor Música (Roque Baños).

El secreto de sus ojos recibió los premios de Mejor Fotografía (Félix Monti), Guión Adaptado (Eduardo Sacheri y Juan José Campanella), Actriz Protagonista (Soledad Villamil) y Actor Secundario (Guillermo Francella). Curiosamente este último ni siquiera está nominado a los Goya pese a realizar una de las mejores interpretaciones del año. La película argentina estuvo representada por el director y productor de cine Gerardo Herrero, uno de los encargados de subir al escenario para recoger los premios del filme, ocasión que aprovechó para dar rienda suelta a su simpatía y buen humor.

La Gala finalizó con la entrega de la Medalla a la Mejor Película que recayó en Celda 211. Los productores agradecieron el premio y lo dedicaron al director Daniel Monzón. No faltó el homenaje a todos los miembros de la industria del cine que nos dejaron en 2009. Una lista demasiado larga, precisaron los presentadores. Finalizada la lectura, una calurosa ovación cerró uno de los momentos más entrañables de la ceremonia. Como también lo fue el reconocimiento a la mejor labor periodística a la escritora María G. Santa Eulalia.

Y no podemos concluir sin señalar el galardón que recibió el director español, Rafael Gordon por su trabajo documental La mirada de Ouka Leele, premio que recogió también la protagonista del filme, Bárbara Allende. El realizador dijo de Concha Velasco que ella no era una actriz, sino un casting completo y tuvo un recuerdo emocionado para su camarógrafo Julio Madurga que se ha ido a rodar unos planos por el cielo.

¿Y qué pasa con Los abrazos rotos de Pedro Almodóvar y con Ágora de Alejandro Amenábar? Cero patatero para cada uno. Y ni una protesta en el auditorio. Así que se confirma que determinados productos cinematográficos son más un paquete bien adornado pero sin chicha. La doble A ha vuelto a suspender.

Tras la ceremonia se proyectó una de las películas candidatas a Mejor Película en los Oscars y que se estrenará en España el 26 de febrero: Una educación, de Lone Scherfig. Se trata de un filme muy cuidado, con grandes interpretaciones, y que bien vale más de una reflexión. Cuenta la historia de una niña de 16 años y un hombre entrado en los 30. Ambos experimentan tal relación sentimental que la chica tendrá que plantearse si quiere seguir estudiando para ser aceptada en Oxford o dejar la escuela y centrarse en una vida de lujo con su enamorado. Carey Mulligan, cuyo físico recuerda al de Katie Holmes, también es candidata a Mejor Actriz.

José Luis Panero

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