La agencia de Noticias NOTIVIDA informa que esta semana se ha publicado una Resolución del ministerio de Salud de la Ciudad de Buenos Aires que garantiza que "en toda dependencia de salud y bajo toda circunstancia, se deberá respetar la identidad de género adoptada o autopercibida", de los pacientes.Como la misma resolución refleja, la norma está en consonancia con la política progay del Gobierno de Kirchner. La Resolución lleva el N° 2.272, fue firmada el 24 de octubre por el Ministro de salud porteño Alberto De Micheli y se publicó en el Boletín Oficial Nº 2802 (2/11/2007). La norma le garantiza a todo aquel que concurra a un centro de salud –por cualquier circunstancia- que será respetada su "identidad de género adoptada o autopercibida" (art. 1º). "Cuando una persona utilice un nombre distinto al original por considerarlo representativo de su identidad de género adoptada o autopercibida, y a su solo requerimiento, dicho nombre deberá ser utilizado para la citación, registro, llamado y otras gestiones asociadas" (art. 2º). Sobre las huellas de Kirchner En los considerandos de la Resolución se afirma que: Ø     Desde el año 2003 con el apoyo de Argentina y otros países, ONUSIDA está promoviendo la inclusión de la no-discriminación por orientación sexual en los instrumentos de Naciones Unidas". Ø     En el año 2006, nuestro país, junto a cincuenta y dos países, apoyó la iniciativa del Gobierno de Noruega, en la declaración oral al Consejo de Derechos Humanos de las Naciones Unidas, donde se reconoce que existe violación a los derechos humanos por orientación sexual e identidad de género. Recordemos además que el "Plan Nacional contra la Discriminación" que el presidente Kirchner aprobó mediante el Decreto 1086/2005 prevé: Ø     Revisar los planes de estudio del personal de la salud incorporando el enfoque de género y orientación sexual. (p.185) Ø     Reconocer los derechos de las personas con diversa orientación sexual e identidad de género en las instituciones de salud –públicas y privadas–, garantizándoles la atención e internación en espacios donde se respete su orientación sexual e identidad de género. (p.240) A escasos días de las elecciones se olvidaron de los pobres En materia de salud reproductiva (anticoncepción, esterilización voluntaria y aborto) hemos escuchado hasta el hartazgo la falacia de que son políticas que privilegian a los pobres. Buscaban la "equidad social" al disponer el suministro gratuito de anticonceptivos –incluso los de efecto abortivo-, porque los pobres no los pueden comprar y los ricos sí. Buscaban la "equidad social" al garantizar las ligaduras de trompas en todos los centros de salud, porque los pobres no pueden costear esa intervención quirúrgica y los ricos sí. Buscan la "equidad social" con la legalización del aborto porque a diferencia de los ricos "los pobres mueren por aborto clandestino". Curioso es que sólo se acuerden de los pobres cuando se trata de servicios de salud reproductiva, como si fuera lo único que, a diferencia de los ricos, no pueden adquirir (los que no pueden pagar un ginecólogo, no pueden pagar un oncólogo, un abogado, un profesor…). Y más curioso aún es que ahora obliguen a las mujeres pobres a compartir sus espacios con los travestis. Las mujeres de nivel socio-económico alto podrán pagar habitaciones privadas. Las de los sectores más humildes se sorprenderán, por ejemplo, cuando la "señora" que tiene internada al lado pida el papagayo. NOTIVIDA www.notivida.org