La publicidad de los llamados stress test en Estados Unidos permitió aliviar al mercado y recuperar la confianza. Y eso que el presidente de la AEB, Miguel Martín reconoce que los exámenes eran de pacotilla. Aún así, los mercados se los creyeron. Así que aplaude de que Europa haya decidido practicar la misma política de transparencia. En realidad es lo que habían reclamado desde hacía tiempo. Entre otras cosas porque los bancos españoles están sustancialmente mejor que los europeos. Aún así, no termina de hacerle gracia la foto individual. Sobre todo, porque él representa a todos los bancos. Si hay que hacerlo individual, pues habrá que hacerlo; yo estoy a favor, estoy encantado.
Martín es claro. Ocultar las cosas no sirve para nada más que para aumentar los rumores mal informados o malintencionados. Por su parte, el vicepresidente del Santander, Matías Rodríguez Inciarte, también se ha felicitado de que el Banco de España se adelante a una decisión paneruopea. En realidad, no se adelanta, obedece las pautas marcadas por el ECOFIN. Inciarte considera que la publicación de las pruebas de esfuerzo servirá para disipar dudas y mejorar la confianza.
Andrés Velázquez
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