Sus aviones siguen bombardeando las ciudades rebeldes. En Túnez, se lleva a cabo una movilización humanitaria sin precedentes.
Desde el momento en que la revolución se ha convertido en una guerra civil, la situación en Libia se ha convertido en más imprevisible. Cada día se producen nuevas batallas y en las últimas horas parece que las tropas del dictador libio están recuperando parte de la iniciativa. Ya han recuperado alguna ciudad que estaba en manos de los rebeldes y se aprestan a atacar la ciudad petrolera de Ras Lanuf. Además, prosiguen los bombardeos de los aviones de Gadafi sobre las ciudades rebeldes.
Mientras tanto, Europa intenta mantener contactos con la oposición, pero de manera escondida, algo que los rebeldes libios rechazan. En el fondo quieren que Europa dé la cara y muestre públicamente su apoyo. Sino, hoy les aplaudirán, pero mañana quién sabe si les darán la espalda.
Por su parte, en Túnez, se está organizando una de las mayores movilizaciones humanitarias para dar acogida a los huidos del país vecino que ya se cuentan por miles.
Además, el Santo Padre, Benedicto XVI recordó en sus palabras del ángelus del domingo el conflicto que se está viviendo en el país africano, y mostró su oración y cercanía, además de pedir asistencia y socorro para las poblaciones afectadas.
Juan María Piñero
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