Sr. Director:

El matutino argentino INFOBAE que se edita en la ciudad de Buenos Aires da cuenta en su edición del 12 de enero de 2005, página 28, que se ha lanzado un programa conjunto entre UNICEF y el Departamento de Laicos (Deplai) de la Conferencia Episcopal Argentina (CEA), denominado "Mamás del Corazón".

Allí se informa que lo recaudado es a beneficio de UNICEF y que se enmarca en un proyecto mayor llamado "REDINFA", que internacionalmente manipula la mencionada agencia de la ONU. "Mamás del Corazón" es auspiciado por la marca "Pampers", del laboratorio multinacional Procter & Gamble, y tiene por objetivo, según la información indicada, "prevenir el embarazo precoz", sobre todo, en los sectores sociales de menores recursos. En la gacetilla que se difundiera no se menciona a Procter & Gamble,  fabricante de anticonceptivos y del llamado "Viagra femenino", sino a su línea "Pampers" de pañales para bebés. De allí que, a primera vista, parecería una  incongruencia que alguien que fabrica pañales auspicie que no nazcan niños.

Completando la información, luego de una investigación, todo queda más claro. Por otra parte, el "REDINFA" es un proyecto que ha sido denunciado internacionalmente, sobre todo en Perú y Colombia, como claramente abortista. En Perú, auspicia el "Plan Nacional de Acción por la Infancia y la Adolescencia 2002/2010" para promover la "salud reproductiva" con el patrocinio de agencias pro-aborto de la ONU como el Fondo de Población (UNFPA), la OPS, la OMS y UNICEF. Estas agencias, como se sabe,  alientan el control poblacional -incluida la anticoncepción y el aborto- en las naciones altamente endeudadas y ricas en recursos naturales para que puedan destinar sus ingresos a atender sus deudas externas.

Por otra parte, al no desarrollarse demográficamente, quedan como "zonas de reserva" del mundo desarrollado. La Santa Sede suspendió en 1996 su colaboración con UNICEF por su apoyo a las campañas para imponer el aborto. El Magisterio de la Iglesia enseña que la anticoncepción no sólo es dañina para la mujer sino que transforma a la misma en un simple objeto de placer produciendo, además, una grave distorsión moral: disocia la razón de unión entre los sexos de su responsabilidad en la transmisión de la vida, quitando al acto marital su potencial finalidad procreativa.

El proyecto en cuestión, parecería alentar solapadamente un nuevo Magisterio según los dictados del Banco Mundial: que los pobres sigan siendo pobres, que no se reproduzcan y que las empresas farmacéuticas del mundo desarrollado ganen dinero. Fomentar la anticoncepción, en los niños sobre todo y marginar a los padres es alentar la promiscuidad, sabotear la institución matrimonial y ayudar a la expansión del SIDA y las enfermedades sexuales. La Conferencia Episcopal de Argentina debe desautorizar esta colaboración no sólo contra el Magisterio de la Iglesia sino contra el interés de Argentina.

Roberto Castellano. Presidente de Pro-Vida (ONG) Argentina.

María Laura Garmendia. Secretaria www.infovida.org.ar

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