Varios inmigrantes viajan Huelva-Lérida con billete pagado y emprenden el viaje de vuelta Nadie quiere tener inmigrantes sin papeles. Así que la estrategia seguida es la misma que la que practicaba Jesús Gil en Marbella. Gil les montaba en el tren y los mandaba a Málaga. Que se las arreglen en la capital. Y el ejemplo cunde. Huelva los mete en un tren camino Lérida con el billete pagado. Al llegar a Lérida, la Generalitat no sabe que hacer con ellos y los envía de regreso a Huelva. Todo un pin-pon.
¿Y ahora? Ahora nada. Pero los más perversos afirman que esta estrategia sirve para recortar el déficit de RENFE, mostrar la diversidad de los pueblos de España a quienes nos visitan, promover el turismo interior y recortar los problemas mientras que se produce el viaje. O sea, para nada. ¿No existe una conferencia sectorial sobre inmigración? ¿De qué hablan en esas reuniones?