Otro problema añadido, señala Villaseca

 

Éramos pocos y se nos ocurrió subvencionar el consumo de carbón autóctono. Lo primero, es duda que no viole los principios de libertad de mercado establecidos por la UE, porque obviamente es una subvención a una producción propia. Segundo: emite CO2 y nos dificulta el cumplimiento de los compromisos de Kyoto. Pero las minas están en León. He aquí la clave. El problema es que la broma nos sale entre 500 y 1.000 millones de euros; cerca de 936 según algunos. Un problema añadido, señala el consejero delegado de Gas Natural, Rafael Villaseca.