La morosidad del sector se encuentra en el 1,5%

Con la crisis, los proveedores se han quejado de la morosidad de las comunidades autónomas y ayuntamientos. Semejantes deudas han causado cierres de PYMES y han iniciado una cadena de impagos negativa para la economía. Algunas de estas autonomías y grandes municipios ya han decidido recurrir al factoring para pagar a los proveedores. El recurso al factoring entre estas administraciones aumenta alrededor de un 20%.

Las compañías de factoring compran las facturas a cambio de un interés y una comisión y se encargan de la administración de las cuentas que deben cobrar y la cobertura por insolvencias. Los usuarios consiguen liquidez, se despreocupan de la gestión del cobro, aseguran el riesgo y mejoran su ratio financiero.

Eso sí, las empresas de factoring se aseguran de financiar lo que es casi seguro que van a cobrar, por lo que la morosidad ha sido siempre baja. El negocio no se libra del aumento de la mora, pero mantiene bastante control sobre los impagos, a lo que se suma el hecho de que se financian operaciones a corto plazo, que permiten ver el comportamiento de los pagadores. La tasa de morosidad ha pasado del 0,8% de 2008 al 1,5% de 2009, según informa la Asociación Española de Factoring (AEF). Se duplica, pero se mantiene muy por debajo del 5% que ya supera el sector bancario.

En España, el capital que mueve el factoring supone 104.223 millones de euros, el 9,93% del PIB y son las industrias manufactureras, el comercio y la construcción las que abarcan más de la mitad de las cesiones. El número de socios de la AEF ha aumentado pero, por primera vez desciende la actividad (1,28%), afectada por el descenso de variables como el consumo.

Rodrigo Martín

rodrigo@hispanidad.com