Sr. Director:
Desde 2008, el sostenimiento de la Iglesia depende exclusivamente de los católicos y de todas aquellas personas que reconocen la labor de la Iglesia.

Quienes libremente quieran hacerlo, pueden marcar la casilla de la Iglesia Católica en su Declaración de la Renta.

Un 0,7 por ciento de sus impuestos se dedicará así, sin coste adicional para el contribuyente, a la ingente tarea que la Iglesia desarrolla. Este sencillo gesto no le supone a nadie ni pagar más, ni que le devuelvan menos. 

Si se quiere marcar la casilla llamada "Otros fines sociales" es posible hacerlo al mismo tiempo que se marca la de la Iglesia. El Estado dedicará entonces un 0,7% a esos "Otros fines sociales" y un 0,7% a la Iglesia.

José Morales Martín