De entrada, los denunciados pasan la noche en el calabozo y son ellos quienes tienen que demostrar su inocencia

Como ocurrió en el caso de las clínicas abortistas, una vez más ha tenido que ser una productora danesa la que haya sacado a la luz una de las grandes injusticias legalizadas de nuestro país. En esta ocasión se trata de las falsas denuncias por maltrato: ante la sola denuncia, el acusado va al calabozo, después ya se verá.

Según el vídeo, colgado en la web de Projusticia, cada día las mujeres en España interponen 350 denuncias falsas contra hombres. Pero son ellos quienes tienen que demostrar su inocencia.

Mariano Tomás

mariano@hispanidad.com