• Los bancos aportarán el 0,8% de los depósitos inferiores a 100.000 euros.
  • Pero todavía no queda claro a quién se salva en caso de crisis bancaria: ¿por encima de esos 100.000
  • Y Alemania, como siempre, sigue negándose a poner fondos.  
La Presidencia de la UE y la Eurocámara han llegado este martes a un acuerdo para crear un sistema de fondos de garantía de depósitos nacionales, que trata de homogeneizar los mecanismos previstos por cada Estado para garantizar los depósitos inferiores a 100.000 euros, los únicos garantizados en una quiebra bancaria. Así, se fija que deberán cubrir un mínimo del 0,8% de esos depósitos, una cantidad que se constituirá con aportaciones de los bancos de cada país durante un período de diez años.

Esos depósitos por debajo de 100.000 euros estarán garantizados a través de fondos financiados por la banca, en lugar de tener que recurrir a fondos públicos financiados por los contribuyentes. Pero todavía no queda claro a quién se salva en caso de crisis bancaria. ¿Y los que tengan ahorrados más de 100.000 euros

El Consejo de la Unión Europea y el Parlamento Europeo, tras tres años de negociaciones, han llegado a este principio de acuerdo político. No obstante, quedan en el aire aspectos importantes, como establecer qué ocurrirá si el dinero fijado no fuera suficiente.

De esta forma, cada fondo nacional -en el caso de España el FDG- tiene que tener recursos equivalentes al 0,8% de los depósitos del país en un plazo de diez años y los depositantes tendrán que recibir su dinero en el plazo de siete días laborables, según indicó el PE en un comunicado. No obstante, si la Comisión Europea lo utiliza, el porcentaje puede ser reducido al 0,5% de los depósitos garantizados en el caso de "sectores bancarios concentrados", es decir, cuando los activos bancarios tienden a estar concentrados en manos de pocos bancos.

Asimismo, los bancos financiarán los fondos de garantía de depósitos nacionales y tendrán que hacer sus aportaciones de acuerdo a su perfil de riesgo, siendo los que más actividades de riesgo asumen los que más tendrán que contribuir. El sistema de garantía de depósitos de la UE forma parte de la Unión Bancaria y es el tercer pilar de la misma después de la supervisión bancaria única y el futuro mecanismo único de liquidación bancaria que negocian actualmente los países miembros.

Es decir, el llamado cortafuegos no se ha definido con claridad y es probable que su funcionamiento quede pendiente de concretar para los dos próximos años, ya que el engranaje del mecanismo de resolución no entrará en vigor hasta 2016.

Las diferencias entre los Estados están en que se pretende que dependa del fondo de rescate europeo, es decir, del Mecanismo Europeo de Estabilidad (MEDE), aunque Alemania se muestra reticente, ya que no quiere que ese fondo establecido con dinero público sirva para cubrir reestructuraciones bancarias. En definitiva, Alemania sigue negándose a poner fondos.

Este miércoles, los ministros de Economía y Finanzas de la Unión Europea, el Ecofin, analizará lo aprobado aunque, posiblemente, la decisión final dependa del Consejo Europeo que reúne a los líderes de la UE el jueves y viernes.

Todo esto olvida algo importante: los ministros de Economía se niegan a la posibilidad de que quiebre algún banco, es algo que no contemplan ni en puntura. Y es injusto. Cuando 'Embutidos Martínez' quiebra, ni el Estado ni la UE acuden en su ayuda.

¿Por qué con los bancos sí Lo único que hay que asegurar son todos los depósitos de los ahorradores -también por encima de cien mil euros-, que para eso los han ahorrado.

Andrés Velázquez
andres@hispanidad.com