Aprovechando como reclamo comercial la fecha del 6-6-06, los estudios Century Fox se han lanzado a la carrera de realizar un remake de La profecía (1976), considerada todo un clásico del cine de terror.
Argumentalmente, esta nueva versión es un calco de la película original. Es decir, hablamos de un diplomático norteamericano al que, tras el fallecimiento de su hijo recién nacido, le ofrecen la posibilidad, en el mismo hospital, de adoptar otro bebé como propio. A partir de la trágica fiesta del quinto cumpleaños de ese niño, llamado Damien, sus padres empezarán a advertir que éste tiene un comportamiento bastante anormal. Tanto es así que el padre adoptivo, por una serie de advertencias y señales, comenzará a sospechar que el niño es, en realidad, el Anticristo, lo que le llevará hacia una carrera sin retorno para librar al mundo de ese ser diabólico.
Llama la atención que en los actuales tiempos de relativismo moral, en los que la gente se declara mayoritariamente como agnóstica, se realicen este tipo de películas en las que se da por hecho la existencia del Demonio pero no de Dios. Algo sobre lo que se debería reflexionar.
En cualquier caso no puede calificarse sino como simplemente entretenida esta nueva versión en la que se echa de menos el empaque que otorgaba Gregory Peck a su personaje en la película original. Igualmente, y siguiendo con el tema del reparto, el joven director John Moore (al que se le debe otro discutible remake: el de El vuelo del Fénix) ha incorporado, en un claro guiño cinematográfico, a la actriz Mia Farrow, que era la víctima de la conspiración de un grupo satánico en la famosísima
Para: Los que no vieron la versión original de 1976 y crean en todo tipo de vaticinios sobre la llegada del Anticristo
