Unanimidad en las encuestas: aumenta el rechazo de los estadounidenses al inquilino de la Casa Blanca

Como decía John Fitzgerald Kennedy, parafraseando a Lincoln, no se puede tener contento a todo el mundo todo el tiempo y esto es lo que le ocurre al actual Presidente de los Estados Unidos, Barack Hussein Obama.

A su llegada a la Casa Blanca, todo el mundo se encontraba obnubilado ante el esplendor del proclamado nuevo director de la política mundial. Sin embargo, tras un año en el Despacho Oval, la realidad -especialmente en EEUU- es totalmente distinta, ya que la credibilidad de Obama está por los suelos, quizás porque sus promesas electorales no concuerdan con su política.

La caída de popularidad del presidente está justificada por varias razones. Primero, en cuanto a política exterior, ha seguido exactamente el mismo estilo agresivo de su antecesor, e incluso ha aumentado tal agresividad con medidas como el envío de 30.000 soldados más a Afganistán, y muchos analistas piensan que esto no acortará el conflicto sino que, por el contrario, lo alargará.

Segundo, la política económica de Obama, se ha basado en salvar, con dinero de los norteamericanos,  a las instituciones financieras que provocaron la crisis económica, lo que no ha ayudado a combatir el paro que ha aumentado de forma sustancial desde su toma de posesión, hasta situarse en la cota del 10%, algo impensable en Estados Unidos.

Asimismo, su proyecto de reforma sanitaria está gozando de gran rechazo, dado que puede generar al país un enorme déficit fiscal y agravar la ya precaria salud de la economía estadounidense.

Por ello, no es de extrañar que la popularidad de Obama caiga día a día y existen varias encuestas que lo demuestran. Según el estudio de la cadena NBC  en cooperación con el diario Wall Street Journal, la popularidad de Obama se encuentra en empate técnico, ya que el 47% de los americanos aprueban su gestión por el 46% que la suspenden. Según el estudio de la agencia Gallup, el 51% de los americanos aprueban la gestión del presidente por el 43% que la rechaza. El medio más optimista acerca de la popularidad del actual presidente es la cadena CNN -cercana al Partido Demócrata- donde se asegura que el 54% de los americanos aprueban la gestión del presidente demócrata por el 44% que la rechaza. El medio más pesimista con la gestión de Obama es la agencia Rasmussen Reports -muy cercana al Partido Republicano- que afirma que el 56% de los estadounidenses rechazan la gestión de su presidente. Sin duda, la mejor manera de conocer cuál es la verdadera popularidad del presidente, es observar la página de la agencia Real Clear Politics, que establece la media entre todos los estudios de popularidad del presidente. Según esta agencia el 49,7% de los americanos aprueban el trabajo de Obama y el 44,6% lo rechaza. En cualquier caso, el que fuera el presidente electo más popular de los últimos 50 años pierde fuelle y cada vez a más velocidad.

Sin duda, Obama tendrá que invertir esta tendencia negativa, ya que en noviembre de 2010 hay elecciones legislativas, en las que se renueva todo el Congreso y buena parte del Senado. Si quiere que sus proyectos lleguen a buen puerto, tendrá que mantener la mayoría en ambas cámaras, lo que según los estudios, es muy difícil que consiga.

Gabriel López

gabriel@hispanidad.com