Sr. Director:
Una mentira repetida lo suficiente es asimilada al final como verdad. Dice la revista Nature que 125.000 años atrás, el nivel del mar era unos 5 metros superior y la temperatura unos 6 grados mayor a los actuales (y en aquel entonces no había CO2 resultante de la actividad humana).

 

Los que nos conciencian casi con violencia, a evitar el supuesto calentamiento de aquí a un par de siglos, se basan en datos de hace tan sólo 60 años, dándose la paradoja de que se falla en las previsiones meteorológicas del día siguiente.¿Qué se pretende? El Fondo de Población de la ONU quiere la implantación mundial de los derechos reproductivos (esterilización, anticoncepción y aborto), para reducir aún más la población y lo condiciona al éxito de la lucha contra el cambio del clima: «Las duras realidades del alto nivel de emisiones per cápita () urgen a movilizar a la humanidad entera para frenarlas, ahora que estamos al borde de un posible desastre climático». Peter C. Smith, de la International Right to Life Federation, advierte que el «verdadero desastre inminente» es «la reducción demográfica actual del mundo desarrollado» que se está exportando al mundo en vías de desarrollo.

El informe de la ONU se felicita de la disminución natal en Japón y la Unión Europea, y critica su aumento en EEUU. El principal asesor de ciencia de Obama, John Holdren, es favorable a las medidas coercitivas, ya en los 70 hizo un llamamiento al aborto forzoso y a la esterilización.

Eva N. Ferraz