Sr. Director:
¡Qué fácil es ser un valiente antifranquista y luchar contra Franco cuando Franco ya ha muerto!

 

Ahora vemos a estrellas judiciales mediáticas como Jiménez Villarejo pronunciar "ardorosos" discursos contra el franquismo pero hay que recordar un poco de esa memoria histórica que tanto le gusta remover.

Villarejo juró la Ley de 1958 de Principios del Movimiento, es decir, las esencias del franquismo y desde 1962 fue Fiscal del aparato judicial franquista en Barcelona. ¿Por qué no se negó un "antifranquista" como él a jurar los fundamentos del franquismo? 

¿Por qué no renunció a su bien pagado puesto en el aparato judicial del régimen? ¿Dónde se los dejó por aquel entonces sus principios democráticos y antifranquistas?

José Martínez Tortosa