Sr. Director:

En una sorprendente manifestación de radicalismo político, el Partido Socialista de Cataluña ha presentado un documento en el que imputa a los representantes de la Iglesia Católica varios delitos como "incitar a la discriminación y la violencia contra el colectivo homosexual". No conforme con ello, el PSC ha mostrado su desprecio por la democracia y la libertad religiosa apuntando la conveniencia de acabar con las misas populares propias de las fiestas mayores de los pueblos o con las ofrendas de títulos deportivos a la Virgen María en sus diferentes advocaciones.

El PSC ha llegado demasiado lejos. En primer lugar, ha imputado a los católicos delitos tipificados en nuestro Código Penal. Si el PSC tiene pruebas de esos delitos, su deber es presentarlas ante los tribunales. Si el PSC carece de pruebas y sus imputaciones son falsas, a quien cabría imputarle un delito tipificado en el Código Penal -concretamente el delito de calumnias- es al propio PSC.

En segundo lugar, el PSC ha propuesto sin tapujos poner fin al ejercicio de la libertad de culto y a la libertad religiosa, ambas reconocidas por la Constitución. Las celebraciones religiosas de las fiestas mayores de los pueblos y las ofrendas de títulos deportivos a la Virgen María son iniciativas que la sociedad civil lleva a cabo en el ejercicio de sus libertades democráticas. Pretender impedirlas o acabar con ellas desde el poder es algo propio de un régimen totalitario, y rebasa el límite de lo tolerable en un Estado de Derecho.

Señor presidente, le pido a usted que desautorice a sus correligionarios del PSC. Hace poco usted aseguró a los ciudadanos que en España vive "una de las etapas de más libertad política y religiosa" de su historia. Las declaraciones de sus correligionarios del PSC indican más bien lo contrario. Ahora que tiene ocasión, usted debe ser fiel a su palabra y demostrar con hechos lo que ha asegurado con palabras. De lo contrario, miles de ciudadanos comprometidos con las libertades, la democracia y el respeto por la ley nos consideraremos en el deber de manifestarnos para expresar públicamente nuestro rechazo a su Gobierno en las calles y también en las urnas.

Juan Andrés Oria de Rueda

oria@agro.uva.es