Crece el paro en el mes de septiembre en 48.102 personas

 

España tiene el crecimiento intertrimestral más bajo de la zona euro tras Grecia. La subida del IVA ha frenado en seco el consumo. La reforma laboral es una incógnita.

Las predicciones macroeconómicas para España no tienen visos de mejorar en lo que queda de año, ni en el venidero. Así lo señala el Círculo de Empresarios en su publicación de Asuntos Económicos de este mes de octubre.

Los oscuros nubarrones no parecen alejarse de la economía española y las expectativas que se han generado dudan del cumplimiento de los compromisos presupuestarios apenas alcanzados y muestran un escenario de persistente crecimiento de paro y desempleo (como se ha podido comprobar en los datos de este mes de septiembre).

Aunque hace apenas unos meses los stress test, parecían dar un respiro al sector financiero, elemento esencial para la recuperación económica, todos los datos y previsiones señalan que la economía de España saldrá más tarde de la recesión, como ya está sucediendo, y de manera más lenta.

En los datos del Interim Economic Assessment de la OCDE, del 9 de septiembre, se señala que la recuperación económica mundial podría estar frenándose más rápidamente de lo previsto, por lo que afectará de manera todavía más directa a España, que apenas se está recuperando. Los datos del Eurostat siguen esta misma línea al indicar que España, al cierre del segundo trimestre del año, ha registrado la tasa de crecimiento intertrimestral más baja de la zona euro (0,2%), con la excepción de Grecia, cuyo PIB cayó un 1,5%.

Estos datos se ven reflejados en la mayoría de los sectores de la economía española, con caídas muy significativas: en el sector de la construcción (-36,5% interanual), en el sector industrial (- 0,3%) o en el sector exterior (en el primer semestre del año ha crecido un 10% el déficit comercial con respecto al mismo periodo de 2009).

A estos datos negativos hay que añadir que se estima que la demanda agregada se contraiga debida al recorte de gastos y a la subida de impuestos (IVA). Esta frenada en el consumo se debe a la desaparición del efecto ejercido sobre el consumo en el primer trimestre como adelanto al alza del tipo impositivo del IVA en julio.

Y para terminar, la reforma laboral del mercado de trabajo. Es verdad que se han hecho retoques, pero las características fundamentales como la brecha entre trabajo temporal e indefinido, políticas activas ineficientes, etc..., persisten, lo que hace más difícil la creación de empleo y el avance de la productividad.

Todo esto muestra un panorama bastante tétrico si no se toman medidas drásticas que ayuden a salir a la economía del país del estado semicomatoso en que se encuentra.

Juan María Piñero

juanmaria@hispanidad.com