Sr. Director:
El señor ZP supera ya a Mendizábal. Su robo, además de a nuestros bolsillos, es mucho más grave porque afecta a la misma dignidad humana, convirtiendo a las personas en objetos de su ansia de poder, con leyes como el derecho al aborto, la deformación del concepto de familia y su desintegración, a la que no es ajena la científica EpC, y la desaparición del libro de familia, o el matrimonio homosexual; ahora la muerte digna, y un largo etc.

 

Al propio tiempo, asistimos a la paulatina venta del patrimonio del Estado para hacer caja; así, parece que una parte de los aeropuertos va a privatizarse, lo mismo que las muy rentables loterías. ¿A qué manos irán a parar? Recuerdo el asalto de González a las empresas de Ruiz Mateos, algunas de las cuales se vendieron después por nada.

Pero no es suficiente para mantenerse en el poder; he leído que ZP habría ofrecido a EEUU aumentar su presencia militar en España; tal vez, ¿un nuevo Gibraltar?

En mi infancia se practicaba el juego cortaterrenos: jugaban dos en un trozo de tierra, y lanzaban por turno un hierro de punta fina, y donde se clavaba se trazaba una línea que separaba en dos el terreno, quedándose una parte el lanzador, y así sucesivamente, hasta que perdía el jugador que se quedaba sin terreno para poner un pie. Me pregunto dónde -dentro de poco- lo pondremos los 47 millones de españoles.

Amparo Tos Boix