Todos los católicos y las personas de recta formación moral deben oponerse a la Ley del matrimonio homosexual de forma clara e incisiva, según ha declarado este viernes la Conferencia Episcopal. A través de la nota de su Comité Ejecutivo, los obispos españoles han expresado con toda claridad cuál debe ser la actitud de los católicos españoles ante una ley que carecería propiamente del carácter de una verdadera ley por encontrarse en contradicción con la recta razón y con la norma moral.

La nota hace referencia no sólo al derecho de los ciudadanos a no cumplir la norma, sino también a la obligación de los políticos de no votar a favor de esta ley. La Conferencia Episcopal recuerda también que el ordenamiento democrático deberá respetar y garantizar el derecho de los ciudadanos a objetar frente a una norma que consideren inmoral.