• La Asociación de Víctimas argumenta que "supone un claro acto de enaltecimiento del terrorismo tipificado en el artículo 578 del Código Penal".
  • La Guardia Civil registra el despacho del senador de Bildu Iñaki Goioaga tras la operación de este miércoles contra ETA.
  • El Gobierno vasco, compungido, cree que la operación refleja "el empecinamiento" de Interior en que "nada ha cambiado".
  • Mientras, la Fiscalía de la Audiencia pide a Interior un informe sobre la filtración de la operación contra ETA.
  • Y el obispo Munilla pone los puntos sobre las íes y advierte a los etarras que no es suficiente reconocer el daño causado y deben pedir perdón. 
Como se sabe, la Guardia Civil llevó ayer miércoles a cabo una operación contra el denominado frente de makos de ETA (frente de cárceles) en el País Vasco y Navarra que se saldó con la detención de ocho personas, entre ellas los abogados Arantza Zulueta y Jon Enparantza, supuestos cabecillas del entramado de conexión con la cúpula de la organización terrorista. Zulueta y Enparantza están encuadrados en el sector más duro del entorno etarra y eran los encargados de mantener en las cárceles una férrea disciplina entre los reclusos.

Mientras, la Fiscalía de la Audiencia Nacional ha abierto a primera hora de la mañana de este jueves diligencias informativas por la difusión de una nota y un mensaje en Twitter del Ministerio del Interior en la que se adelantaba la operación antiterrorista realizada ayer. El órgano dirigido por el fiscal jefe, Javier Zaragoza, ha solicitado un informe al Ministerio sobre la remisión del comunicado

Pese a todo, la operación ha continuado esta mañana con la autorización, por parte del juez de la Audiencia Nacional, Eloy Velasco, a la Guardia Civil para el registro del despacho del senador de Bildu, Iñaki Goioaga, situado en las mismas instalaciones de la calle Elcano de Bilbao donde se encuentra el despacho de la principal arrestada, la abogada Arantxa Zulueta. Se trataba de buscar documentación que los detenidos podrían haber escondido en ese lugar al tener conocimiento de que la Guardia Civil se iba a personar en lugar tras la nota de prensa del operativo adelantada por el Ministerio del Interior.

Estas operaciones contra ETA no han gustado nada al PNV ¿por qué será El portavoz del Gobierno vasco, Josu Erkoreka, ha considerado que la operación supone "un paso atrás" y es reflejo del "empecinamiento" del Ministerio de Interior en "hacer creer que nada ha cambiado". Además, ha hecho referencia a su comunicación sobre la operación policial antes de que ésta se produjera y la ha calificado de "burda orientación mediática".

La reacción del entorno de ETA ha llegado de la plataforma Tantaz Tanta (sucesora de Herrira), organizadora de la movilización de este sábado 11 de enero en favor de los presos de ETA, que ha animado a dar "una respuesta contundente e inapelable" a la "actitud provocadora" del Gobierno, al que ha acusado de intentar "desviar la atención del punto de conflicto, que es la dispersión". En este sentido, ha defendido que "no son tiempos de detenciones, sino de soluciones".

Recientemente, la Asociación Víctimas del Terrorismo (AVT) presentó ante el Juzgado Central de Instrucción Número 6 de la Audiencia Nacional una petición para prohibir dicha movilización. Este jueves la AVT ha insistido desde Twitter en ese sentido.

Como explica la AVT, "al igual que ocurrió con Herrira, la convocante de este acto, Tantaz Tanta, trata de disfrazar su realidad de herramienta de ETA para llevar a cabo los mismos fines que en su día llevaron las ilegalizadas Gestoras Pro Amnistía y Askatasuna o la investigada Herrira, en cuyo sumario se encuentra personada la AVT como acusación popular". Por todo ello, la AVT solicita la prohibición del acto proetarra organizado por Tantaz Tanta y convocado para el próximo 11 de enero en Bilbao "ya que supone un claro acto de enaltecimiento del terrorismo tipificado en el artículo 578 del Código Penal".

Recordemos que la AVT también prevé emprender acciones legales contra los participantes en el acto de Durango (Vizcaya), entre ellos más de 60 etarras excarcelados tras la derogación de la doctrina Parot, al entender que se cometió un delito de enaltecimiento del terrorismo.

A todo esto, el obispo de San Sebastián, José Ignacio Munilla, ponía los puntos sobre las íes al afirmar que el reconocimiento del daño causado por parte de los presos de ETA es "claramente insuficiente", ya que, en su opinión, es necesario un "arrepentimiento profundo" para que la paz en Euskadi "tenga calidad".

Entrevistado por la Cope, el prelado ha advertido que si el paso dado por los presos de ETA en su último comunicado, en el que reconocían el "daño multilateral causado", no se «profundiza más» puede convertirse en un gesto «carente de valor ético-moral y puede ser compatible con una postura soberbia».

Andrés Velázquez

andres@hispanidad.com