Los periodistas parlamentarios tienen fama de tener incluso mucha más mala uva que los económicos, que ya es decir. En la mañana del lunes 4, desayunaban con la titular de Educación, María Jesús San Segundo.

Naturalmente, tras la noticia de la pasada semana por la que la asignatura de Religión pasaba a ser no evaluable, la pegunta era cuál sería la alternativa para los alumnos que no quisieran cursar asignatura de Religión. Con gran elegancia, San Segundo advirtió que se estaba estudiando volver a la reforma de 1994. En otras palabras, la reforma del parchís, una de las alternativas que se les ofrecía a los alumnos que no quisieran cursar Religión.