Sr. Director:
Seguro que los lectores recuerdan las afirmaciones del Presidente de Bolivia sobre los nuevos avances de la ciencia y de la técnica: los pollos criados en granja son los culpables de la homosexualidad (por cierto estos colectivos no han hecho mucho por contradecirlo) y los transgénicos lo son de la calvicie.

 

Poco antes, Fidel Castro seguía inventándose enemigos. El dictador cubano acusó a EE. UU. de crear nueva gripe. Y es que la imaginación del hombre que lleva tiranizando Cuba por medio siglo parece no tener límites cuando se trata de buscar un chivo expiatorio a los efectos nocivos del sistema socio económico que implantó en la Isla y que ha arruinado a uno de los países más prósperos de América.

Lo anterior nos viene demostrado porque el dictador cubano, Fidel Castro, insinuó en un artículo publicado en Juventud Rebelde que Estados Unidos es el responsable de la aparición de enfermedades anteriormente desconocidas en América como el dengue hemorrágico o la gripe A (H1N1) que ha causado decenas de víctimas en México.

¿Alguien se acuerda de la gripa A? Ni los laboratorios que crearon la alarma se atreven a hablar de ella, excepto uno de los amigos de nuestro presidente. Parece que se buscan unos amigos que o bien están aplicando los últimos detalles de las nuevas tecnologías o son unos iluminados.

Suso do Madrid