• Es uno los sancionados por los supervisores americanos, británicos y suizos. Los otros 'prendas' son UBS, Citigroup, Royal Bank of Scotland y HSBC.
  • Los cinco bancos se ponían de acuerdo para fijar un tipo de cambio, compartir información confidencial y aplicar comisiones excesivas.
  • Dicho de otro modo: se 'forraban' en el mercado financiero más especulativo, el de divisas.
  • Las multas, que suman 2.593 millones de euros, reabren el debate sobre la Tasa Tobin para gravar los flujos de capitales.
  • Suiza obliga a UBS, además, a limitar el 'bonus' a los 'traders', que llegó a alcanzar el 200% del salario base de dos años.

Tiene su guasa que el primer banco norteamericano por activos, JP Morgan Chase, recomendara la semana pasada a sus clientes que no invirtieran en deuda española -por aquello de la incertidumbre política que plantea la situación en Cataluña o la irrupción en intención de voto de Podemos-, y que tenga que abonar ahora una multa de 530 millones de euros por manipular los tipos de cambio en el mercado de divisas. El mundo financiero es así en ese doble rasero para medir los riesgos y especular.

JP Morgan Chase es uno de los cinco grandes bancos sancionados por esa cuestión. Los otros 'prendas' son UBS, Citigroup, Royal Bank of Scotland y HSBC. Todos ellos tendrán que pasar por ventanilla y pagar una suma que asciende a 2.593 millones de euros por manipular los tipos en el mercado financiero más especulativo, el de divisas. La multa es la conclusión con la que acaba un año de investigaciones conjuntas de los supervisores financieros de EEUU, Reino Unido y Suiza.

¿Qué hacían esos bancos: ponerse de acuerdo para fijar un tipo de cambio determinado, además de compartir información confidencial -incluida la de órdenes de compraventa de clientes- y aplicar comisiones excesivas.

Para entendernos, lo que resume todo lo anterior es que esos cinco bancos se han 'forrado' en un mercado prácticamente inexistente, el de divisas, si no fuera por su naturaleza esencialmente especulativa. El economista James Tobin propuso precisamente gravar los flujos de capitales con una tasa para frenar la especulación. Desde entonces esa tasa se asocia a su nombre, Tasa Tobin. Y no es ninguna tontería en el caso que nos ocupa, si tenemos en cuenta que el mercado de divisas mueve diariamente más de cuatro billones de euros en operaciones. Sólo el 1% de esa cantidad corresponde a los flujos derivados para exportaciones e importaciones o el obligado cambio de divisas para los turistas que se trasladan de un país a otro. El restante 99% es especulación pura y dura en un mercado abierto las 24 horas del día y los 365 días del año. La Tasa Tobin tiene mucho sentido, pero los países no se quieren poner de acuerdo, sobre todo por la oposición de Gran Bretaña y Estados Unidos. Europa, mientras, no quiere emprender un camino en solitario. Poderoso caballero es don Mercado.

La mayor multa ha sido contra el primer banco suizo, UBS, que tendrá que pagar 620 millones de euros. Además, el regulador de su país le ha obligado a automatizar al menos el 95% de su negociación en los mercados de divisas internacionales y a limitar los 'bonus' que paga a sus 'traders'. No es de extrañar si tenemos en cuenta que sus pluses llegaron a alcanzar el 200% del salario base de dos años.

En fin, Citigroup tendrá que pagar 535 millones de euros, JP Morgan Chase, los ya mencionados 530 millones de euros), Royal Bank of Scotland, 508 millones de euros y HSBC, 495 millones de euros.

Rafael Esparza

rafael@hispanidad.com