Informa IESVS. Jim Bob y Michelle Duggar del conocido Discovery Health están esperando al hijo número 19. Los ecologistas radicales, feministas, defensores del control de población y otros partidarios del derecho a elegir están aterrados. Pero los Duggars han elegido lo mejor.

No soy muy aficionado a los reality shows de la televisión. Mis gustos van más hacia EWTN o las noticias de FOX. Dado que viajo mucho y tengo una granja, Weather Channel (el canal del tiempo) también es otra elección casi obligada. Sin embargo, la noticia de que los protagonistas del reality-show Discovery Health, Jim Bob y Michelle Duggar están esperando su hijo número 19, de alguna manera, llegó hasta mí a través del Internet.

Como podrán suponer, me alegré con la noticia. Mi esposa y yo tenemos una familia grande, aunque solo la mitad de la de los Duggars, y en el PRI alentamos a otros a hacer lo mismo. Una de mis charlas se titula Las Diez Grandes Razones para tener Otro Hijo. En esta ponencia le digo al público que hay abundante espacio en los jardines de Dios para todos nosotros.

La izquierda, como era de esperarse, protestó ante la noticia. ¿Es que no saben que los bebés causan el calentamiento global? se le oyó murmurar a Al Gore, mientras que David Letterman lanzó su acostumbrada ración de chistes obscenos. Para Planned Parenthood, los defensores del control de la población, no era cosa de risa. Tiene una particular animosidad hacia aquellas parejas que son generosas en acoger a sus hijos en familias numerosas. Criadores, nos llaman burlonamente.

Mirando a la Norteamérica de hoy, uno tendría que decir que estos anti-natalistas han ganado. Las mujeres estadounidenses tienen un promedio de sólo 2.09 hijos. Pero este promedio invisibiliza la realidad de dos conductas extremadamente diferentes en sus hábitos reproductivos. En uno de estos extremos tenemos a los solteros latte-sipping (tomadores de café con leche), quienes egoístamente, renuncian a los niños y al matrimonio por igual. En otro,  a parejas como los Duggars, que piensan que los hijos son regalos de Dios.

En la época de fundación de los Estados Unidos existían muchas familias como los Duggars. Incluso hoy en día, en el movimiento pro-vida tenemos un promedio de 3 hijos y probablemente la mayoría de nosotros conocemos al menos una pareja que tiene diez o más hijos. En mi propia familia, hubiésemos querido duplicar la cantidad de hijos y alcanzar a los Duggars pero no pudimos por razones ajenas a nuestra voluntad. Las parejas con mente generosa como los Duggars dicen, ¿Quiénes somos para rechazar cualquiera de los regalos de Dios?.

Tal generosidad, sin embargo, tiene que pagar un precio muy alto. El Departamento de Agricultura estima que, en la actualidad, criar a un niño cuesta US$ 207,800, desde su nacimiento hasta la edad de 18 años. A esto hay que sumar que en promedio el gobierno se lleva más del 40% del dinero de la familia, y en parte para pagar el costo de la Seguridad Social y Medicare de aquellos que no tienen hijos.

Desde la perspectiva de aquellos que miran esto solamente como una cuestión de dólares y centavos, los Duggars son unos tontos. Están gastando una pequeña fortuna para criar a un montón de niños. Cuando Jim Bob y  Michelle Duggar lleguen a la edad de jubilación, tampoco se beneficiarán personalmente de los millones de dólares en impuestos que sus hijos mayores un día pagarán al gobierno. Por el contrario, parte de este dinero irá a pagos de Seguridad Social y Medicaid de aquellos que tuvieron pocos hijos o ninguno en absoluto.

En 1940 había 160 trabajadores de apoyo por cada persona que gozaba de la Seguridad Social. En el 2006 esta cifra había descendido a 3.3 trabajadores por pensionista. En el 2034 habrá solamente 2.1 trabajadores por cada persona cobrando su cheque de jubilación del gobierno. En lugar de burlarse de los Duggars por tener muchos hijos, la izquierda estéril debería agradecerles (a ellos y a todos los pro-vida) por ayudar a subsidiar su jubilación. Sin embargo, no aguanten la respiración esperando una señal de gratitud. Podría ser fatal.

En cuanto a los Duggars, al igual que a los Moshers, la verdad es que no les interesa cómo funcionan los números.

Ellos entienden que en las matemáticas de Dios, cuando el Amor se entrega a más personas, no se divide sino que se multiplica.

Y continuará multiplicándose para siempre.

IESVS

www.iesvs.org