• "Las atrocidades cometidas y las prácticas que se llevan a cabo no tienen nada que ver con el Islam, ni con sus principios de tolerancia y convivencia", dice la Organización de la Cooperación Islámica (OCI).
  • Por ejemplo, lo último del Estado Islámico de Irak y el Levante (EIIL): ordena la mutilación genital femenina.
  • Y hace unos días impuso la "yihad del sexo", es decir, la obligación de cada familia de ceder las chicas vírgenes a los yihadistas.
  • EIIL quiere extender el control sobre la llanura de Nínive y ha atacado con morteros otra ciudad, Tilkif, donde se han refugiado muchas de las familias cristianas y chiítas expulsadas de Mosul.
La situación de los cristianos en Irak se hace cada vez más complicada desde el comienzo de los ataques de los yihadistas sunitas del Estado Islámico de Irak y el Levante (EIIL). Y sobre todo tras su entrada en la ciudad de Mosul en junio, la persecución a los cristianos se ha intensificado.

Hasta el punto de que los propios islamistas de bien lo están denunciando: "El desplazamiento de los cristianos de Mosul es un crimen intolerable. Las atrocidades cometidas y las prácticas que se llevan a cabo no tienen nada que ver con el Islam, ni con sus principios de tolerancia y convivencia", ha dicho la Organización de la Cooperación Islámica (OCI), grupo que reúne a 57 países musulmanes, recoge Zenit. Además la cristofofia también es un crimen cobarde.

El secretario general de la OCI, el saudita Iyad Madani, manifestó la disponibilidad de la organización para "proporcionar la ayuda humanitaria necesaria a las personas desplazadas, en espera de que puedan regresar a casa". Por cierto que entre los expulsados de Mosul también se encuentran los chiítas de la ciudad.

EIIL creó un califato en el norte de Irak y al este de Siria y advierte que los cristianos de Mosul "deben convertirse al Islam y pagar una tasa especial". Si no lo hacen corren peligro de sufrir "la pena capital" y "deben abandonar" la capital de la provincia de Nínive.

La situación, además, va a peor, pues en la tarde del martes 22 de julio, los yihadistas de EIIL lanzaron un ataque con morteros contra la aldea de Tilkif en un intento de penetrar una de las ciudades de la llanura de Nínive, donde se han refugiado muchas de las familias expulsadas. "El ataque comenzó desde un pueblo controlado por los yihadistas -informa a la Agencia Fides el sacerdote caldeo Paul Thabit Mekko- pero fue rechazado por las tropas kurdas peshmerga. En la noche, el pánico llevo a decenas de familias cristianas a huir a Dohuk, pero los soldados kurdos de un puesto de control les dijeron que la situación estaba bajo control y que podían regresar a casa. El párroco Louis Hadil me ha confirmado que a las cuatro de la mañana la situación de emergencia en Tilkif había desaparecido", publica Fides. 

Esto quiere decir que EIIL quiere extender el control sobre la llanura de Nínive. "Pero la reacción de los Peshmerga -señala el p. Thabit Mekko- confirma que los kurdos están decididos a proteger esta zona y tienen al firme intención de rechazar cualquier intento de irrupción de los militantes yihadistas. Aquí, ahora, garantizando la seguridad de la población sólo están las fuerzas militares kurdas".

Y la seguridad de la población es importante, pues las prácticas de los yihadistas son terribles. Por ejemplo, allí donde entran, implantan la mutilación genital femenina, por orden del líder de EIIL, Abu Bakr al-Baghdadi, ha ordenado que todas las mujeres del "califato" sean sometidas a mutilación genital. La orden habría aparecido en un comunicado y publicado en internet. En el texto, los yihadistas afirman que la práctica ha sido impuesta por el profeta Mahoma y muestran una lista de sus hadith (los dichos), que a su parecer contienen esta indicación, informa también Zenit.

EI justifica la decisión alegando su compromiso por "cuidar" a la sociedad musulmana y evitar "la expansión del libertinaje y la inmoralidad" entre las mujeres.

No es la primera decisión que es tomada por el Estado islámico que implica a las mujeres. Hace unos días se ha impuesto la "yihad del sexo", es decir, la obligación por parte de cada familia de ceder las chicas vírgenes a los yihadistas, y la separación por sexo en la universidad. Mientras en los otros comunicados se hacía referencia a Mosul, ciudad controlada por el EI, en el de la mutilación genital se hace una referencia explícita a Aleppo, en el norte de Siria.

Según informaciones recibidas por Saoud Sbai, periodista y escritora italo-marroquí, "al menos 28 niñas han ya sufrido esta orden en los días pasados". Una noticia, dice Sbai en un comunicado, "que revela una vez más lo peligroso que es, en su locura, este personaje al que Occidente continúa dejando las manos libres".  

Además, Sbai denuncia que en Europa esta atrocidad es actualmente poco conocida, mientras "los medios árabes y las asociaciones de mujeres árabes hablan de ello con preocupación". La periodista cree que "la comunidad internacional no puede quedarse mirando, a la espera de que se cumpla este crimen horrendo contra la humanidad".

Recordemos que antes del asalto del EIIL, la comunidad cristiana de Mosul estaba formada por unas 3.000 personas. Durante el último mes, por lo menos un tercio de ellos abandonó esa ciudad. Según las últimas cifras difundidas por la ONU, desde el inicio de la ofensiva de los yihadistas sunitas, que comenzó el pasado mes de enero, han muerto por lo menos 5.576 civiles en Irak, 2.400 solo en el mes de junio. Mientras que 11.662 personas han resultado heridas.

José Ángel Gutiérrez
joseangel@hispanidad.com